El 8 de marzo de 2011, el Parlamento Europeo votó a favor de la adopción de un impuesto sobre transacciones financieras en toda Europa (conocido también como “Impuesto Robin Hood”). El impuesto sobre transacciones financieras ha sido descrito como “un impuesto minúsculo que puede significar una enorme diferencia”. La ISP se siente muy alentada por la decisión del Parlamento Europeo. Los esfuerzos de movilización del brazo europeo de la ISP –la Federación Sindical Europea de Servicios Públicos-, de las afiliadas europeas y de algunas ONG han contribuido grandemente a ese éxito.
Con esa decisión se reconoce y pone de relieve que el sector financiero debe considerarse responsable de la crisis financiera, y que el impuesto recaudado puede contribuir al desarrollo de sociedades y economías sustentables. Es un primer paso valeroso que puede orientar hacia un acuerdo mundial más amplio.
Nuestro esfuerzo por hacer de esa visión una realidad continúa con energía redoblada, dice Peter Waldorff, secretario general de la ISP.
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